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Los aparatos electrónicos se convierten en e-waste (residuos electrónicos) cuando no se quieren, dejan de funcionar o llegan al final de su vida útil.
¿Qué son los residuos electrónicos (e-waste)?
Opciones para los activos informáticos retirados
Estándares mundiales sobre residuos electrónicos: ¿por dónde empezar?
Beneficios de una eliminación adecuada de los residuos electrónicos
Desde las empresas de Fortune 500 hasta las pequeñas startups, la electrónica desempeña un papel fundamental para facilitar las operaciones empresariales cotidianas. Intentar operar sin ordenadores portátiles, teléfonos móviles u otros dispositivos es casi imposible, ya que cuando estos activos inevitablemente se rompen o quedan obsoletos, comienza la búsqueda de sustitutos.
Pero, ¿qué ocurre una vez que estos dispositivos han cumplido su función? Resulta que la mayoría se deposita en los flujos de residuos electrónicos. Por esta razón, si no sabes cómo gestionar tus activos tecnológicos retirados, ¡no eres el único! De hecho, la basura electrónica es uno de los mayores retos del sector informático.
Parece una palabra de moda, pero los residuos electrónicos son un área de concentración clave para la gestión del ciclo de vida de los activos informáticos (ALM – Asset Lifecycle Management). Los aparatos electrónicos se convierten en e-waste (residuos electrónicos) cuando no se quieren, dejan de funcionar o llegan al final de su vida útil.
¿Ojos que no ven, corazón que no siente? Aunque algunos no piensen demasiado en sus activos informáticos cuando ya no están, los dispositivos que se tiran a la basura se han convertido en un importante problema medioambiental. Para 2030, se prevé que los residuos electrónicos alcanzarán unas 74 millones de toneladas métricas al año, lo que supone un aumento de 16,6 millones de toneladas métricas con respecto a 2021.
¿Qué ocurre con todos estos aparatos si no se eliminan adecuadamente?
Para evitar contribuir a prácticas irresponsables de desecho electrónico, recomendamos las siguientes buenas prácticas sostenibles y seguras de eliminación de activos informáticos (ITAD):
Después de que tu equipo haya tomado una decisión sobre qué hacer con los activos informáticos retirados u obsoletos, aún queda trabajo por hacer, ya que es posible que aún haya información confidencial de la empresa almacenada en tus dispositivos. Por lo tanto, antes de reciclar, recomercializar o redistribuir cualquier cosa, asegúrate de borrar de forma segura cualquier información que pueda poner a tu empresa en riesgo.
Los dispositivos deben escanearse meticulosamente y los datos deben eliminarse por completo antes de que salgan de las instalaciones para su reutilización o redistribución. Sin embargo, esta tarea no es tan sencilla, ya que al formatear una unidad de disco se borran los punteros a los archivos, pero la mayor parte del contenido de los dispositivos con datos puede recuperarse con un software especial. Ni siquiera las múltiples acciones de formateo son una garantía.
Muchos proveedores externos están dispuestos a recomercializar o reciclar los activos informáticos retirados, pero tu organización debe tener cuidado al seleccionar un socio. En muchos casos, la transición a un proveedor es la primera vez que los equipos dejan de estar bajo el control de la empresa, por lo que el borrado de datos es la parte más importante del proceso de disposición de activos y el lugar más fácil para que un proveedor tome atajos. Si tienes dudas, siempre recuerda que tienes la opción de que el proveedor realice un servicio de saneamiento de datos in situ. También es bueno estar atento a aquellos procesos con una cadena de custodia y destrucción probada con certificaciones verificadas de terceros como R2, e-Stewards y NAID.
Recuerda, no solo puedes poner en marcha medidas de seguridad proactivas, sino que además puedes integrar prácticas sostenibles en el funcionamiento de tu organización.
A continuación te explicamos cómo asegurarte de que su empresa se deshace de los activos informáticos al final de su vida útil de forma sostenible y respetuosa con el medio ambiente:
No existe una normativa única sobre residuos electrónicos. Dependiendo de tu sector y de dónde operes, hay variaciones sobre cómo proceder una vez que tus activos informáticos ya no son útiles para la empresa. En Estados Unidos, existen diferentes normativas tanto a nivel estatal como federal. Actualmente, 25 estados tienen leyes para el reciclaje electrónico y la directiva europea sobre Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) está en vigor desde 2003.
La Asociación Mundial de Estadísticas sobre Residuos Electrónicos (Global E-Waste Statistics Partnership) es un gran recurso para estar al día de la legislación sobre residuos electrónicos. Asegúrate de que tu socio de ITAD está bien versado y cumple plenamente toda esta normativa. Aunque las certificaciones de terceros como R2 y e-Stewards ayudan a garantizar el cumplimiento, tu equipo también debe hacer su propia diligencia.
Invertir en prácticas responsables de Secure ITAD no solo es bueno para tu empresa, sino también para el medio ambiente.
Muchas organizaciones están obligadas a informar sobre sus cifras de generación de residuos electrónicos y sobre el impacto de sus prácticas de eliminación en el medio ambiente. Con estos cambios —por grandes o pequeños que sean— en la forma en que recomercializan, reutilizan o reciclan los dispositivos electrónicos al final de su vida útil, las organizaciones pueden cumplir o superar sus objetivos medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) al tiempo que reducen su impacto.
Al informar sobre datos críticos relativos a la generación de residuos, la desviación de vertederos, las tasas de recomercialización y reciclaje, las organizaciones pueden compartir de forma proactiva y transparente su contribución a una economía más circular y a un futuro sostenible.
La recomercialización y el reciclaje de productos electrónicos pueden:
Para obtener más información sobre los residuos electrónicos, consulta nuestro proceso completo de gestión del ciclo de vida de los activos aquí.
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