Transforma la experiencia de tu información

Qué se interpone en el camino de la transformación digital

Para la mayoría de las organizaciones, el proceso de transformación digital está muy avanzado y sigue siendo una prioridad para las empresas internacionales.¹ Uno de los principales impulsores de la transformación digital es el uso de la tecnología para extraer información de los datos con el fin de mejorar la toma de decisiones y las experiencias de los clientes. Sin embargo, si la información se encuentra almacenada en papel, es difícil de encontrar y no se puede acceder a ella ni compartirla fácilmente. Además, tratar con proveedores independientes para cada una de las tareas, como la gestión de contenido en línea, el procesamiento de documentos en papel, el almacenamiento físico y digital, la gobernanza de la información y la gestión del ciclo de vida, es algo muy complejo y lento, y suele dar lugar a errores.

Estos silos de datos provocan ineficiencias en la gestión e impiden la innovación. Las empresas quieren utilizar lo último en tecnología, como el procesamiento inteligente de documentos (IDP) y la IA generativa, pero incorporar esta tecnología en plataformas heredadas es muy complicado. Muchas organizaciones siguen confiando en sistemas y procesos manuales para gestionar sus procesos de trabajo organizativos. De hecho, una organización típica utiliza datos de 400 fuentes y, a continuación, tiene que volver a codificarlos manualmente para obtener el formato necesario.²

Los procesos manuales y la combinación de documentos físicos y digitales pueden provocar cuellos de botella y retrasos, así como dificultar el acceso a la información, especialmente para los trabajadores híbridos y los teletrabajadores.

Además, las empresas necesitan formas más rápidas y menos costosas de cumplir con multitud de normativas de privacidad y seguridad de los datos.

Si bien el incumplimiento de normativas cuesta un promedio de más de 14 millones de dólares a las empresas, el costo para lograr el cumplimiento tampoco es una cifra insignificante.³ El trabajo necesario para la gestión de los documentos y los datos representa el 94 % de los costos anuales necesarios para garantizar el cumplimiento,⁴ lo que puede suponer hasta 31 millones de dólares.⁵