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El cliente, uno de los bancos más grandes de Polonia, quería digitalizar sus documentos más activos y utilizados con frecuencia.
El cliente, uno de los bancos más grandes de Polonia, quería digitalizar sus documentos más activos y utilizados con frecuencia.
Como parte de un servicio integral, los especialistas de Iron Mountain® escanean y suben los registros digitales al repositorio central del banco.
Liberados de la necesidad de volver a escanear documentos repetidamente, los empleados pueden dedicar más tiempo a construir relaciones y ayudar a los clientes con sus finanzas.
Como muchas instituciones similares, este banco tuvo que conciliar el desafío de mantener un gran archivo de documentos históricos que estaba legalmente obligado a conservar, con la necesidad paralela de impulsar la productividad y la eficiencia operativa mediante la migración a registros digitales.
Como parte de una relación de 12 años con Iron Mountain®, esos registros antiguos se almacenaron fuera de las instalaciones en almacenes altamente seguros. Sin embargo, con más de 600 sucursales en Polonia, los empleados que procesaban nuevas solicitudes y pedidos a menudo perdían tiempo buscando y digitalizando archivos, a veces escaneando los mismos documentos muchas veces.
En lugar de digitalizar todo su archivo, lo que habría sido extremadamente costoso y habría llevado mucho tiempo, el banco buscó un enfoque más práctico y rentable para digitalizar solo sus documentos en papel más activos y utilizados regularmente.
"En lugar de digitalizar todo su archivo, lo que habría sido extremadamente costoso y habría llevado mucho tiempo, el banco buscó un enfoque más práctico y rentable para digitalizar solo sus documentos en papel más activos y utilizados regularmente."
Aprovechando nuevamente las habilidades y la experiencia de Iron Mountain, el banco creó una operación digital más sostenible, al mismo tiempo que gestionaba mejor los riesgos y el cumplimiento normativo.
En solo nueve meses, Iron Mountain ayudó al banco a digitalizar 32,5 millones de páginas, generando más de 1,4 Terabytes de imágenes y 150 millones de activos identificados. Durante todo el proyecto, Iron Mountain cumplió constantemente con los objetivos de SLA, que incluían el procesamiento de un mínimo de 213.000 páginas por día. Una vez convertidos en imágenes digitales, los documentos originales en papel fueron almacenados de manera segura en las instalaciones de Iron Mountain.
Ahora, el banco tiene la garantía de que documentos financieros importantes, como hipotecas, están siempre seguros y accesibles, en cualquier momento, en cualquier lugar y desde cualquier dispositivo.
La inmediatez que brindan los registros digitales garantiza que los clientes tengan experiencias fluidas y respuestas rápidas a sus consultas. Además, los empleados del banco no son interrumpidos constantemente para localizar y digitalizar documentos.
En cambio, tienen más tiempo para hacer lo que mejor saben hacer: ayudar a los clientes a tomar las decisiones financieras correctas y alcanzar sus objetivos personales. Además, hay un ahorro financiero generado por la devolución de espacios alquilados innecesarios.
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