Avanzando en la sostenibilidad de la investigación biológica

En el sector de la investigación biológica la gestión del ciclo de vida de la información es fundamental para impulsar la verdadera sostenibilidad y el impacto medioambiental positivo.

El eslabón perdido entre la investigación biológica y la sostenibilidad

Dado que la investigación biológica se enfrenta a los retos e innovaciones exclusivos de la biotecnología, la creación de redes sanitarias, la fabricación de productos químicos y otros, es lógico que la mayoría invierta mucho en prácticas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Aun así, se utilizan a diario sustancias biológicas y químicas tóxicas. Las clínicas y las plantas de fabricación de dispositivos médicos se enfrentan a los costes de consumo de agua y energía. Los laboratorios y las cadenas de suministro requieren métodos de eliminación seguros y las instalaciones de producción de medicamentos suelen tener una gran huella de carbono.

Reconocer esto ha llevado a los líderes de la industria a adoptar grandes esfuerzos de sostenibilidad. Más allá del impacto medioambiental directo de las empresas de investigación biológica, la transformación digital y el crecimiento han provocado un mayor consumo de recursos naturales y nuevas formas de residuos. Esto se manifiesta principalmente en la forma en que las empresas de investigación biológica manejan sus registros y datos, tanto digitales como físicos.

El ciclo de vida de la información se sitúa en el centro de la economía circular, que existe para minimizar cualquier impacto medioambiental negativo al permitir la reparación, el reciclaje, manufactura o el reacondicionamiento de los recursos para su reutilización.

Una mirada más profunda al impacto de la transformación digital en el medio ambiente

Las empresas del sector de la investigación biológica dependen del flujo y reflujo de sus sistemas de datos, pero esto sigue generando residuos invisibles incluso en las plataformas puramente digitales.

• La demanda de datos aumenta con cada correo electrónico compartido, cada perfil de cliente intercambiado, cada pedido de la cadena de suministro actualizado y cada resultado de laboratorio producido. Del mismo modo, los centros de datos (y el consumo de recursos naturales necesarios para alimentarlos) crecen a medida que aumenta la demanda de conectividad y de red.
• Las pruebas y la I+D farmacéutica dan lugar a montones de informes con la intensa supervisión y la rigurosa normativa a la que se adhieren estas empresas.
• Los desarrolladores de tecnología biomédica y sanitaria generan residuos de papel y plástico a medida que se diseñan y distribuyen los productos.

Una gestión adecuada de todos estos datos y de los materiales relacionados, tanto físicos como digitales, puede ayudar a reducir drásticamente el consumo de recursos naturales y a minimizar los residuos.